La estación central de Milán, es una estación ferroviaria italiana, terminal, ubicada en la plaza Duca d’Aosta, en el centro de la ciudad de Milán, capital de la región de Lombardía. Es la primera estación de la ciudad y segunda estación italiana con un promedio de aprobación de 120 millones de pasajeros al año, alrededor de 300 trenes y unos 320.000 pasajeros al día. Es servido por el Frecciarossa y Frecciargento, italiano Intercity y Eurocity a Suiza, que une la Thello con Paris-Gare de Lyon y por supuesto, los trenes regionales a Tirano Trenord y Bérgamo. Fue inaugurado oficialmente en 1931, reemplazando de esta manera la antigua estación de 1864 porque no podía soportar el tráfico de la época. La primera piedra fue colocada por el rey Víctor Manuel III en 1906 pero la construcción comenzó en 1912 y debido a la Primera Guerra Mundial y la crisis, se procedió con demasiada lentitud. Cuando Benito Mussolini se convirtió en jefe de Gobierno decidió que la estación debe representar el poder del régimen fascista. Su fachada tiene 200 metros de ancho, el techo es de 72 metros, cuenta con 24 andenes y grandes arcos de acero. La estación cuenta con varios pisos con acceso por escaleras, ascensores o escaleras mecánicas. Hay muchas tiendas que venden una gama diferente de productos incluso como cafeterías y restaurantes.
Consejos
Si va a pasar por Milán central, usted encontrará todo lo necesario mientras espera. Si va a viajar con el Freccia, tiene una sala de espera en exclusiva para los clientes Freccia.
Como siempre hay un montón de gente, trate de ir con el tiempo suficiente para tomar el tren porque hay largas caminatas para hacer en función de dónde parte su tren.
Tenga monedas con usted para ir al baño porque se paga para poder entrar y las máquinas de cambio no siempre son funcionales.
